* Para no perderos ninguna entrada nueva, la nueva dirección del blog es Ni Blanco Ni en Botella

domingo, 27 de diciembre de 2015

Compota de manzana y canela. El Asaltablogs Invisible!!

Ayyyyy, pero si ya estamos en el último domingo de mes...¡y del año! 

Y ya sabéis que el último domingo de mes significa reto de El Asalta Blogs, en el que un grupo de blogueros "robamos" recetas a otro blog. Pero como estas son unas fechas especiales, el reto también se viste de Navidad y hacemos la versión gastronómica del amigo invisible: el Asaltablogs Invisible. De esta forma, todos robamos a alguien y somos robados.


En mi caso, mi víctima ha sido Marisa, del blog Thermofan. Es un blog que no conocía y gracias a esto he podido cacharrear y trastear por su cocina. Tiene un montón de recetas buenísimas, casi todas con Thermomix...¡pero yo no tengo Thermomix! Lo bueno es que Marisa piensa en todo y pone también la versión tradicional para que todo el mundo pueda preparar sus recetas ;)


Al final me he decantado por una receta súper sencilla y rápida de preparar, pero que ha tenido el honor de estar presente en la comida de Navidad de mi casa ^_^

Todo fue porque empecé a buscar recetas y no me decidía. Como había que publicar en Navidades, pensé en preparar algo que pudiera llevar para disfrutar en familia. Y justo un día hablando con mi ama y comentando lo que íbamos a comer en Navidad, me habló de poner pato y a lo mejor llevar compota de manzana para acompañar...¡y se me encendió la bombilla! Me sonaba que Marisa tenía entre sus recetas esta misma, así que dije que de la compota me encargaba yo. Así 2 pájaros de un tiro: mi robo y de paso el acompañamiento para el pato!!


Y oye, tengo que decir que nunca me había dado por hacer compota de manzana, pero a partir de ahora la haré más a menudo! Qué fácil y qué rico! Ya sea para acompañar carnes, como complemento de postres o como postre en sí. Muy, muy rica e ideal para aprovechar si tenemos manzanas que se nos estén empezando a apochar o, si tenéis la suerte de tener manzanos en el pueblo como yo, para dar salida a todos esos kilos y kilos de manzanas con los que te encuentras de repente!

En este caso, y para no perder la costumbre de no ceñirme a la receta al pie de la letra (manías que tiene una), le añadí un poco de canela. Según mi txurri la canela se notaba mucho...pero en mi familia nadie dijo ni mú. Y ya sabéis lo que dicen de la canela...así todos contentos! ;)

COMPOTA DE MANZANA Y CANELA

Inspiración: esta receta del blog Thermofan.
Dificultad: requete-fácil.
Tiempo de preparación: 40 min.

Ingredientes

  • 700 g. de manzanas
  • 50 g. de agua
  • 1 cucharada de zumo de limón
  • 40 g. de azúcar
  • 1/2 cucharadita de canela

Preparación


1.- Pelamos, descorazonamos y troceamos las manzanas. Cuanto más pequeños hagamos los cachitos, más rápido se hará.

2.- Ponemos en una cacerola las manzanas, el agua y el zumo de limón. Cocemos a fuego  medio-bajo hasta que la manzana esté blanda.

3.- Añadimos el azúcar y cocemos un par de minutos más.

4.- Trituramos con la batidora hasta obtener la textura deseada. Mientras estamos batiendo añadimos la canela al gusto.

Trucos / Consejos / Variaciones

  • en un recipiente hermético se conserva bien varios días.
  • yo no lo he probado, pero la receta original dice que esta compota se puede congelar.
  • el azúcar se puede sustituir por cualquier otro edulcorante o incluso prescindir de la misma.
  • es ideal para acompañar carnes, sobre todo platos de caza o pato.
  • es una manera ideal de que los niños coman fruta. En ese caso, mejor si no le añadís el azúcar.
  • lo de la canela es opcional.
  • para otra vez se me ha ocurrido que voy a probar a añadirle un chorrito de sidra, para darle otro toque diferente a ver qué tal queda.
  • podéis usar la variedad de manzana que queráis. 

Aprovecho a desearos un Feliz Año Nuevo!!!!! Que tengáis una genial salida de uno y entrada en el otro. Pero, sobre todo, que en el año que entra disfrutéis de la vida a tope, que no dejéis de hacer las cosas que queréis, que aprovechéis todas las oportunidades y momentos de ser felices y le deis importancia a lo que realmente la tiene.

Muás
Iratxe

martes, 22 de diciembre de 2015

Trufas de chocolate super fáciles

¡¡Feliz Navidad!!

Aunque ya lleva más de un mes siendo Navidad en los centros comerciales, ahora sí que ya la tenemos aquí! 


Y como ya es momento de andar estresados con compras de última hora y cocinando como si nos creyéramos estrellas Michelín (aunque las verdaderas estrellas "michelín" seremos después de pasadas las fiestas ;P), os traigo una propuesta súper fácil de preparar y con la que conquistar a todo el mundo. En un pispás las tendréis hechas, sin apenas esfuerzo. Además podréis hacer muchas variaciones para adaptaros a los gustos de cada uno.

Estas trufas son ideales para regalar o para sacar con la bandeja de los postres o acompañando al café.


Lo cierto es que nunca había probado a hacerlas en casa y me ha parecido una maravilla de receta. Si sois amantes del chocolate, tenéis que probarlas porque os van a encantar! 

Eso sí, cuidado porque con las cantidades que os voy a dar salen un montón y son adictivas. Así que ya podéis ir pensando a quién regalárselas ;) Una bolsita y un lacito mono y quedaréis de lujo!


Lo bueno es que han salido a raíz de una pequeña "catástrofe" repostera. Tenía que hacer un taller con niños y les quería llevar ganaché de chocolate para que practicaran un poco con la manga pastelera. Total, que ese día se alinearon los planetas para que todo se enrevesara. Con las prisas, me puse a montar el ganache mientras hacía otras cosas...y me pasé de tiempo! Con lo cual, la textura se cortó y ya no servía para usar con manga. 

Pero claro, no lo iba a tirar, ¡con lo bueno que está! Así que decidí reconvertirlo en trufas ^_^ Oye, hay que intentar sacer siempre algo positivo de los errores!

TRUFAS DE CHOCOLATE


Inspiración: yo misma!
Dificultad: para torpes muy torpes.
Tiempo de preparación: 30 minutos.
Reposo: mínimo 2 horas.
Cantidad: dependiendo del tamaño que les deis, pero unas 40!

 Ingredientes

  • 400 g. de chocolate negro (mín. 55% de cacao)
  • 500 ml. de nata para montar
  • 40 g. de mantequilla
  • cacao en polvo para decorar

Preparación

1.- Troceamos el chocolate y lo colocamos en un bol.

2.- Ponemos la nata a cocer en un cazo. En cuanto rompa a hervir, retiramos del fuego y la vertemos sobre el chocolate troceado. Añadimos también en este momento la mantequilla y con ayuda de unas varillas manuales vamos removiendo hasta que el chocolate se funda del todo. Aseguraos de que no se quedan trozos de chocolate en el fondo del bol.

3.- Cubrimos con film transparente, justo pegado a la superficie del chocolate, para que no le salga costra al enfriarse. Esperamos a que se temple y metemos a la nevera mínimo un par de horas para que coja consistencia.

4.- Sacamos de la nevera y retiramos el film. Con ayuda de una cuchara (o 2) o con las manos (recomendable usar guantes), comenzamos a formar bolas de chocolate. Las vamos depositando sobre una bandeja cubierta con papel vegetal.

5.- Una vez echas todas, espolvoreamos con cacao en polvo por encima.


Trucos / Consejos / Variaciones

  • se conservan bien en un recipiente hermético varios días. Pero si en vuestra casa tenéis calefacción central, de esas que parece que estáis en el trópico, mejor conservarlas en la nevera.
  • en lugar de usar cacao, podéis cubrirlas con coco rallado, frutos secos picados,...
  • a algunas de ellas les eché además un poco de brillo dorado comestible, para que quedaran más elegantes y navideñas ;) 
  • a la hora de formar las bolas, podéis aprovechar y meter algún fruto seco en el centro: avellana, almendra,... 
  • al formar las bolas, ayudaros con un par de cucharas o si lo vais a hacer con las manos, mejor con unos guantes aptos para manipular alimentos. Porque aunque no vais a tener problema de formar las bolas, vais a acabar con las manos pringadas de chocolate.

Ya habéis visto qué fácil es contentar a todos estas Navidades ^_^

Espero que disfrutéis a tope estos días, con la familia, sin ella, comiendo lo que os dé la gana y haciendo lo que queráis. Al final de lo que se trata es de disfrutar, cada uno a su manera.

Muás
Iratxe

lunes, 14 de diciembre de 2015

Turrón de chocolate...¡con nachos!


¿¿¿¿¿Chocolate con nachos?????

¡¡Pues sí!! Y no se me ha ido la olla, aunque con tanto curro últimamente el día menos pensado... Pero bueno, ¿acaso no hay turrón de chocolate con kikos? Pues simplemente sustituimos los kikos por nachos y tenemos una receta de turón super original y buenísima con la que sorprender a todo el mundo.


domingo, 29 de noviembre de 2015

Coquitos o cocadas. El Asalta Blogs

Ya está aquí el último domingo de mes. Esta vez el mes de noviembre se me ha pasado volando, sin darme cuenta, y eso que es el mes que menos me gusta de todo el año. Pero con eso del "veroño" que hemos tenido se ha hecho de lo más llevadero!


Eso sí, entre pitos y flautas el blog lo tengo de lo más abandonado... :(  Pero no podía saltarme la cita con el reto más "chorizo" de la blogosfera. Este mes el blog asalatado ha sido el de Juanan, Cuuking!. Llenísimo de recetas de todo tipo, hay que ver qué productivo es este chico!

Tenía claro que me iba a llevar una receta dulce y, aunque me he quedado con las ganas de hacer los dorayakis que comía Doraemon, tuve que optar por una receta sencilla y rápida. 


lunes, 16 de noviembre de 2015

Overnight oats con sirope de arce y mantequilla de cacahuete


¿Y qué es eso de "overnight oats"? Pues una receta que últimamente se ve mucho, sobre todo en Pinterest, y con la que me picaba mucho la curiosidad. 

Lo de ese nombre en inglés no es porque suene más molón o más sofisticado o comercial. No me gusta hablar de las cosas en inglés, pudiendo hacerlo con su nombre en castellano; pero hay casos, como este, en el que no tiene equivalente en castellano. La traducción sería algo así como "avena durante toda la noche", así que creo que "overnight oats" suena mejor ;)

Básicamente, son copos de avena puestos a remojo toda la noche con algún líquido, generalmente leche (aunque puede ser agua), para que se vayan hidratando. Al día siguiente se pueden comer así sin más o añadirles yogur, fruta fresca,... ¡imaginación!


domingo, 25 de octubre de 2015

Pan de avellanas y avena. El Asalta Blogs

O barritas energéticas caseras, sanas y ligeras.


Ya hemos llegado al último domingo de mes, lo que significa que toca publicar para el reto más chorizo del "interné", El Asalta Blogs. Este mes el turno ha sido para el blog Cocinar con Amigos, de Gloria. Un blog que yo no conocía, pero gracias a este reto he podido descubrir y comprobar que está lleno de recetas buenísimas.

 

martes, 20 de octubre de 2015

Ni blanco ni en botella

Hoy os traigo una entrada un poco diferente. Sin receta, sin trucos de repostería o cocina, sin fotos de tartas o galletas. Hoy es una entrada un poco más personal. Hoy, os pido un favorcito.

En su día lo escribí y compartí en Facebook y Twitter, pero no lo comenté aquí en el blog, en "el progenitor" de todo. Pero quiero que llegue a cuanta más gente mejor, para que la gente lo vaya conociendo.


Hace unos meses, a finales de junio, me confirmaron que la alergia que tenía desde hace 3 años se había "ampliado". Yo era alérgica a la carne de mamífero y me dijeron que quizá podría extenderse también a los lácteos... y así ha sido! 

Lo que me da alergia es un azúcar llamado alfa-gal (o alfa-galactosa), que se encuentra presente en la sangre de los mamíferos. Por lo tanto, no puedo comer nada procedente de este extenso grupo de animales: ni carne, ni embutido, ni lácteos, ni gelatina. Hasta que no te ocurre algo así note das realmente cuenta de lo que comememos, del uso tan extendido que tienen los lácteos como ingrediente en casi todo. Incluso los productos más insospechados llevan lácteos entre sus ingredientes. 

Lo más curioso de esta alergia es el porqué: la causa la picadura de una garrapata. Sí, soy una chica con suerte! ;) Soy un imán para las garrapatas y la consecuencia ha sido esta.

El problema es que como aún es una alergia nueva, muchos médicos ni saben que existe y no está considerado ese azúcar como alérgeno, con lo cual no viene marcado en las etiquetas de los productos. Para intentar que poco a poco se vaya conociendo este problema, os lo cuento hoy aquí, lo he contado más veces en Facebook y Twitter y me decidí a crear otro blog: Ni Blanco ni en Botella. Ya llevo casi 4 meses con él y todas las recetas que publico en el mismo son recetas que no llevan ningún producto proveniente de mamífero. En la primera entrada que publiqué expliqué bien todo lo de la alergia.



Me gustaría mucho que lo leyeráis y, si os gusta lo que veis en ese nuevo blog, os quedéis a seguirlo. También tiene página de Facebook y perfil de Twitter, por si también os animáis a seguirme por ahí.

Perdón por la "chapa" que os he metido, pero me gustaría que cada vez se vaya haciendo más conocido este problema para que, por lo menos, se incluya entre los alérgenos y se indique en el etiquetado de la comida!

Muchas gracias ^_^

Muás
Iratxe

miércoles, 14 de octubre de 2015

Gominolas saludables de zumo

¿Gominolas saludables? ¿Pero eso qué es? Pues simplemente gominolas mucho más sanas y recomendables que las que venden en las tiendas. 

Más allá del mito de que las gominolas comerciales se hacen con petróleo y demás cosas que se han llegado a decir, es cierto que los ingredientes que se usan no son los más saludables del mundo. Gelatinas (que proceden de triturar los huesos del cerdo), colorantes, saborizantes, azúcar a porrón y un montón de mierdas más.


Ojo, que no estoy en contra de ellas! Hasta que por temas de mi alergia me las prohibieron, yo me ponía fina filipina a comer gominolas sin ningún tipo de remordimiento. También he hecho gominolas caseras (aquí o aquí) usando gelatina.

Pero resulta que ya no puedo comer gelatina. Putada.


Una alternativa a la gelatina es el agar-agar, unos polvitos blancos que se obtienen a partir de unas algas. Sin duda, una alternativa mucho más saludable que la gelatina normal. Mi problema con el agar-agar siempre ha sido que no conseguía la misma textura, siempre se me quedaban las preparaciones más líquidas o con mucha menos consistencia que usando láminas de gelatina.

Pero el que la sigue la consigue, y parece que nos vamos familiarizando el agar-agar y una servidora. Y como muestra, estas gominolas.


Están hechas con agar-agar (procedente de un alga) y con zumo de frutas. Vamos, saludables a más no poder! Cierto es que he usado un zumo comercial y lo ideal sería usar zumo de frutas recién exprimido en casa. Pero para compensar el que sea comercial, no les he echado nada de azúcar. Así que es como comerse el zumo, tal cual.

La razón de haber usado zumo comercial en lugar de casero ha sido para aprovechar la Degustabox de este mes, en la que venían 2 botellas de zumo de tomate, pìña y zanahoria de Granini. SI queréis que a vosotros también os llegue todos los meses la caja Degustabox llena de cosas ricas, sólo tenéis que registraros en su página. Si introducís el código HVUHG, el primer mes la obtendréis por 9,99€ en lugar de los 14,99€ que cuesta normalmente. Para que os hagáis una idea de lo que viene:





GOMINOLAS DE ZUMO

Inspiración: una servidora.
Dificultad: nula.
Tiempo de preparación: 5 minutos.
Reposo: mínimo 2 horas.


Ingredientes

  • 1 sobre de agar-agar
  • 1/2 l. de zumo de tomate, piña y zanahoria (o el que queráis)


Preparación


1.- Disolvemos el sobre de agar-agar en un poquito de zumo frío.

2.- El resto del zumo lo ponemos en un cazo al fuego. Añadimos la mezcla anterior y llevamos a ebullición.

3.- En cuanto rompa a hervir, dejamos cocer 2 minutos y retiramos del fuego.

4.- Engrasamos un poco los moldes que vayamos a usar y vertemos la preparación, llenando hasta arriba. Podéis usar moldes para bombones, cubiteras o cualquier tupper o fuente. 

5.- Dejamos enfriar a temperatura ambiente y a continuación metemos en la nevera. Dejar mínimo 2 horas para que cojan consistencia. Mejor si dejáis toda la noche.

6.- Desmoldar con cuidado y...¡a comer!


Trucos / Consejos/ Variaciones

  • como los zumos comerciales ya suelen venir azucarados, no le he querido añadir más azúcar. Si usáis zumo casero, entonces sí que convendría añadir azúcar. Se añadiría al zumo en el cazo.
  • si no tenéis moldes para gominolas o hielos, podéis usar un tupper o una fuente grande. Cuando esté, desmoldáis todo el bloque y podéis cortar con un cuchillo o usar cortadores de galletas para hacer gominolas con formas.
  • el agar-agar se puede sustituir por gelatina normal. En ese caso, seguir las instricciones del fabricante.
  • a la hora de servir, las podéis rebozar en un poco de azúcar.
  • los moldes de bloques tipo Lego los compré en la tienda Casa. Molan mogollón!!!

No hay chuche más sana para dar a los peques de la casa o para darnos un capricho que estas gominolas. Animaos a prepararlas!

Muás
Iratxe

martes, 6 de octubre de 2015

Pastas de calabaza


Una de las cosas buenas que tiene la llegada del otoño es que con él llega la temporada de la calabaza.

Me encanta usarla en todo tipo de recetas. En recetas saladas queda riquísima acompañada con curry. Y en recetas dulces les da un toque buenísimo, aportando jugosidad y un sabor suave que me parece delicioso.


Como llevan mantequilla yo no las he podido probar, pero la gente que las ha probado ha dicho que son de las pastas más ricas que han comido. Y no han sido pocas las personas, porque mi ama me pidió que le hiciera para llevar al trabajo en su cumpleaños y trabaja en un colegio!

La verdad que sólo por el olor que desprendían y el que dejaron por toda la casa no dudo que tienen que estar de muerte.


No son como una galleta de mantequilla clásica, al llevar el puré de calabaza quedan un poco más finas, como si fueran pastas de té. Son ideales para tomar con el té o el café de media tarde o para hacer un regalo dulce.

Además las podéis bañar en chocolate, total o parcialmente, o añadir a la masa trocitos de chocolate, ya que es un sabor que combina muy bien con el de la calabaza.


Por cierto, a partir de ahora seguiré intentando publicar una vez por semana, aunque no sé yo cómo voy a andar. Son dos los blogs que llevo hoy en día y encima este curso en el curro me toca estar a jornada completa de clases (8 o 9 al día) y además soy coordinadora, lo cual se traduce en que me como todos los marrones, meto muchas horas extra y el móvil se ha convertido en una extensión de mi mano.

Pero bueno, que a mí me gusta los fines de semana desayunar algo especial o comer algo diferente, así que espero seguir teniendo material.


PASTAS DE CALABAZA 


Inspiración: estas galletas del blog Kanela y Limón.
Dificultad: media-baja.
Tiempo de preparación: 20 minutos.
Cocción: 15 minutos.

Ingredientes


  • 140 g. de mantequilla blanda (a temperatura ambiente)
  • 150 g. de azúcar glas
  • 120 g. de puré de calabaza
  • 200 g. de harina
  • 100 g. de maizena
  • 1 cucharadita de canela
  • 1/2 cucharadita de jengibre
  • 1/2 de levadura en polvo

Preparación


1.- Precalentamos el horno a 160ºC.

2.- Tamizamos la harina junto con la maizena y la levadura. Reservamos.

3.- Batimos la mantequilla junto con el azúcar glas hasta formar una crema blanquecina. Sin dejar de batir, vamos añadiendo el puré de calabaza. Si veis que coge un aspecto como que se hubiera cortado la mezcla, no os preocupéis, al añadir la harina se arregla.

4.- Añadimos la mezcla de la harina, la canela y el jengibre y batimos hasta lograr una mezcla homogénea.

5.- Pasamos la mezcla a una manga pastelera con una boquilla redonda ancha (podéis usar cualquier otra). Sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal, vamos depositando "líneas" de masa.

6.- Horneamos durante 15 minutos. Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.


Trucos / Consejos / Variaciones
  • el puré de calabaza lo podéis comprar hecho o hacerlo vosotras a vuestra manera. Yo, cuando lo quiero usar para postres, no me complico y lo preparo en el microondas: troceo la calabaza y la meto en el microondas durante unos minutos hasta que esté blanda (hay que ir comprobando pinchando con un tenedor). Una vez lista, la aplastamos sobre un colador para que pierda agua, la trituramos y ya tenemos el puré.
  • yo usé una boquilla redonda de boca ancha para hacer los "palitos", pero le podéis dar la forma que queráis. O si usáis diferentes boquillas, podéis darles texturas o formar distintas, como por ejemplo aquí.
  • la combinación calabaza-chocolate funciona muy bien. Podéis añadir trocitos a la masa o, una vez que ya tengáis las pastas hechas, derretir un poco de chocolate y bañarlas.
  • la cantidad y variedad de especias que utilicéis depende de vuestros gustos.
  • podéis sustituir la calabaza por zanahoria. El resultado es igual de bueno!


Sólo por el olorcito que van a dejar por toda la casa ya merece la pena prepararlas. A ver si doy con la proporción perfecta para hacerlas con aceite y así las puedo comer yo también, que me habéis dado envidia!

Muás
Iratxe

domingo, 27 de septiembre de 2015

Tikvenik. El Asalta Blogs

Pues ya estamos a primer domingo de mes de la nueva temporada del reto más canalla de la blogosfera. El Asalta Blogs comienza su tercera edición, con el mismo afán "chorizo" con el que se creó.


Y para estrenarnos nos ha tocado asaltar a un blog de lujo, llenísimo de recetas ricas. Bea Recetas y más tiene un recetario que parece no tener fin, con recetas dulces, saladas, internacionales, tradicionales. modernas,...

Pero cuando miré el recetario, vi un nombre raruno que no me sonaba de nada y vi que llevaba calabaza...¡zas! Pa' la saca.


viernes, 18 de septiembre de 2015

Salame di cioccolato (sin huevos ni lácteos)

O salchichón de chocolate, pero no me negaréis que suena mucho mejor en italiano...


El salame di cioccolato o salchichón de chocolate es un dulce típico en Italia. Se hace en todo el país, con ligeras variaciones en los ingredientes o en si se come o no en una fecha concreta. Básicamente es una mezcla de chocolate, galletas y algún fruto seco que se amalgaman dándole forma de cilindro, que al cortarlo le da ese aspecto característico como de salchichón, morcilla o algo del estilo.

Es muy fácil de hacer, de hecho, es típico que lo preparen también los niños. 


En efecto, es tan contundente como parece. Es como una chocolatina a lo grande, sin miramientos. 

La versión tradicional utiliza huevos y mantequilla para amalgamar todo, pero a mi no me gusta utilizar huevos si no se van a cocinar  (como sería el caso). También prefiero evitar la mantequilla siempre que se pueda, primero porque me parece más sano y segundo porque así también lo podía comer yo, que no puedo comer lácteos ;) Podéis ver una receta original aquí


Aunque estéticamente no sea el dulce más bonito que hayáis visto, en cuanto lo probéis os vais a enamorar. Sobre todo si sois muy chocolateros/as. Y ya si tenéis niños cerca, os van a hacer la ola!

Lo bueno de esta receta, además, es que os permite un montón de variaciones y cada cual le dará un toque de sabor diferente. Diferentes frutos secos, diferentes tipos de galletas, cambiar el chocolate. introducir alguna otra cosilla que se os ocurra en el relleno,... No os perdáis después de la receta la parte de trucos/consejos/variaciones, porque os doy un montón de ideas para "tunear" este salami a vuestro gusto o adaptarlo a lo que tengáis por casa.


Aproveché que en la Degustabox de agosto venía un paquete de galletas de la marca Avenacol. Son unas galletas de avena de estilo rústico que, además de que así solas estaban muy ricas, han resultado ser perfectas para realizar esta receta, ya que para preparar el salame di cioccolato es importante que las galletas que se usen sean secas (luego os lo explico mejor).

Si también queréis recibir en casa la caja Degustabox todos los meses (podéis consultar aquí su Facebook y aquí su Twitter), sólo tenéis que suscribiros en su página web y si introducís el código MH33G la primera caja os saldrá por 9,99€ en lugar de los 14,99€ que cuesta normalmente. Animaos porque se descubren productos muy interesantes!



SALAME DI CIOCCOLATO (SIN HUEVOS NI LÁCTEOS)


Inspiración: esta versión vegana aquí.
Dificultad: muy, muy fácil, de hecho suelen hacerlo los niños.
Tiempo de preparación: 10 minutos.
Reposo: 3-4 horas en la nevera.


Ingredientes

  • 150 g. de galletas (de tipo seco)
  • 150 g. de chocolate negro para fundir
  • 50 g. de avellanas
  • 40 ml. de leche vegetal
  • 40 ml. de aceite de oliva suave o de girasol

Preparación


1.- Troceamos las galletas groseramente. No, esto no quiere decir que tenéis que insultarlas mientras las estáis partiendo, sino que las partáis en trozos grandes. 

2.- Colocamos en un bol las galletas junto con las avellanas.

3.- Troceamos el chocolate y lo derretimos al baño maría o en el microondas. Yo lo hago en el microondas, calentándolo 30 segundos, remuevo, y si hace falta más voy dándole golpes de 5 segundos, removiendo cada vez. Cuando esté totalmente fundido añadimos el aceite y la leche.

4.- Vertemos el chocolate con el aceite y la leche en el bol y vamos mezclando bien hasta que los ingredientes secos queden bien impregnados con el chocolate.

5.- Volcamos la mezcla sobre un trozo de papel vegetal y le vamos dando forma cilíndrica, ayudándonos con las manos o con el propio papel. Lo envolvemos con el papel y cerramos los extremos como si fuera un caramelo.

6.- Metemos en la nevera por lo menos 3 o 4 horas para que solidifique bien.

7.- Servirlo cortado en rodajas.


Trucos / Consejos / Variaciones
  • podéis usar las galletas que queráis, pero la receta tradicional dice que tienen que ser galletas "secas". Es decir, las galletas bizcochadas, las que son blanditas, no sirven porque al añadir el chocolate derretido con los líquidos se reblandecerían demasiado y se romperían.
  • probad con galletas chiquilín, con speculoos, campurrianas, galletas tipo shortbread, Digestive,... Cada cual le dará un toque diferente al salame.
  • podéis usar los frutos secos que queráis: avellanas, nueces, almendras, pasas,... También se puede usar muesli o algún tipo de cereal.
  • la leche vegetal se puede sustituir por leche normal.
  • a la mezcla le podéis añadir un plátano maduro machacado, le dará un sabor buenísimo!
  • se puede preparar también usando chocolate con leche o chocolate blanco, pero que sea del especial para postres, que funde mejor y luego solidifica mejor también.
  • también se le pueden añadir especias para darle un sabor más especial, sobre todo que combine bien con el tipo de galleta que hayáis usado. Por ejemplo canela, jengibre, pimienta, chile,...
  • dependiendo del tipo de galletas que utilicéis, esta receta es vegana, sin lácteos, sin huevo y puede ser también sin glúten.
  • se conserva bien un par de semanas en un recipiente hermético.


Os aseguro que os va a entusiasmar este salami o salchichón dulce, tanto por lo fácil de hacer que es como por lo adictivo que resulta! Además podéis prepararlo de un montón de maneras diferentes para ir cambiando. Mucho mejor que las chocolatinas comerciales.

Muás
Iratxe

lunes, 7 de septiembre de 2015

Layer cake de mantequilla de cacahuete y cacao



¡¡Por fin mi cumple-tarta!!

Esta es la tarta que preparé para celebrar mi 31 cumpleaños el pasado 22 de agosto. Vale, sí, la decoración me quedó un poco bastante infantilonga... pero es que el año pasado los 30 los cumplí estando fuera y no pude celebrarlo como dios manda (vamos, haciéndome una super tarta), así que este año quería sacarme esa espinita y celebrar los dos. Y no hay fiesta que se precie sin globos! ;)



Esta vez, y sin que sirva de precedente, publico esta receta de forma simultánea en mis dos blogs, ya que no es una receta "sin más", es mi cumple-tarta! Podéis ver mi otro blog aquí, un blog que creé hace poco más de dos meses y en el que publico recetas sin lácteos. Me haría mucha ilusión que me siguierais también por ahí! ^_^

Pero sigamos con la tarta...¡¡Anda que no me comí la cabeza hasta que decidí de qué sabor y cómo hacerla!!


No hace ni tres meses que me confirmaron que no puedo comer absolutamente nada que provenga de mamíferos (léase: carne, embutido, gelatina y lácteos en cualquier versión), así que aún ando adaptando mi forma de comer (y comprar) a esta nueva situación.

Y claro, a la hora de pensar en una tarta, con el bizcocho no tenía problemas, ya que hay muchas recetas de bizcocho que no llevan lácteos. La dificultad me vino a la hora de pensar en el relleno y en la crema para decorarlo. ¡Todas llevan lácteos! O mantequilla, o queso crema, o nata, o mascarpone, o chocolates que llevan leche,...


Por suerte, este verano en mis vacaciones con la bici por Islandia "descubrí" un producto que nunca había probado, básicamente porque me negaba: la mantequilla de cacahuete. ¿Por qué me negaba? Porque, por un lado, me parecía que eso no tenía que ser nada sano y una marranada y, por otro, porque con lo que me gustan los cacahuetes estaba segura que si lo probaba me iba a volver adicta! >_<

Resulta que ahora es uno de mis "aliados" para preparar postres o si me apetece ponerme en plan gocha.


Había visto muchas veces que la combinación mantequilla de cacahuete-chocolate era brutal, así que me decanté por esta opción. Después de darle un  millón de vueltas a si hacer el bizcocho de chocolate y la cobertura de mantequilla de cacahuete sin más, o este bizcocho sin nada pero la cobertura de cacahuete con cacao, o la mantequilla de cacahuete en el bizcocho o cualquier combinación que se os pueda ocurrir, al final vino en mi rescata San Internet.

Buscando recetas sin lácteos o veganas, descubrí la nata de coco!! Ay  madre, qué descubrimiento! A falta de poder usar el queso, que era mi favorito para preparar cremas, ahora por lo menos cuando la tarta sea para comer yo ya tengo con qué decorarla :)



Pues nada, os dejo con la receta de esta tarta que, por cierto, fue vista y no vista. 

LAYER CAKE DE MANTEQUILLA DE CACAHUETE Y CACAO


Inspiración: mezcla de muchas ideas.
Dificultad: lleva su tiempo pero no es imposible.
Tiempo de preparación: 30 minutos.
Cocción: 45 minutos.
Cantidad: para un molde redondo de 16 cm.

Ingredientes


Para el bizcocho de mantequilla de cacahuete:
  • 4 huevos
  • 100 g. de mantequilla de cacahuete
  • 150 ml. de aceite de oliva suave (o de girasol)
  • 200 g. de azúcar moreno
  • 200 g. de harina
  • 1 cucharadita de levadura

Para el almíbar:
  • 100 ml. de agua
  • 100 g. de azúcar moreno
  • 1 cucharada de cacao puro en polvo


Para la crema:
  • 2 latas de leche de coco frías (en la nevera por lo menos desde el día anterior)
  • 100 g. de azúcar glas
  • 50 g. de cacao puro en polvo


Preparación


1.- Precalentamos el horno a 180ºC. Tamizamos la harina junto con la levadura y reservamos.

2.- Batimos los huevos junto con el azúcar hasta que estén bien espumosos. Añadimos el aceite y la mantequilla de cacahuete y seguimos batiendo hasta que se integren bien. Por último vamos añadiendo poco a poco la harina con la levadura, batiendo lo justo para que se integre.

3.- Engrasamos el molde y vertemos la masa. Horneamos durante 45 minutos, comprobando que está hecho pinchando en el centro con un palillo (tiene que salir limpio).

4.- Dejamos templar 5 minutos en el molde y a continuación lo desmoldamos y lo dejamos enfriar en una rejilla.

5.- Mientras se enfría preparamos la crema. Para ello tenemos que separar la nata de la leche de coco: sacamos las latas de la nevera y quitamos la capa superior sólida blanca que se ha formado, eso es la nata. El líquido restante lo guardamos para usarlo en otras recetas.

6.- Batimos esta nata con las varillas a velocidad alta hasta lograr una consistencia como la de la nata montada. Añadimos entonces el azúcar glas y el cacao y continuamos batiendo un par de minutos más. Probad un poquito y rectificar de azúcar o de cacao si queréis. Reservamos en la nevera hasta el momento de montar la tarta.

7.- Por último, antes de ponernos a montar la tarta, preparamos el almíbar calentando el agua junto con el azúcar hasta que rompa a hervir. Retiramos del fuego y añadimos el cacao, removiendo.

8.- Para montar la tarta, cortamos el bizcocho en 3 capas con ayuda de una lira o un cuchillo de sierra. Si le ha salido "pansa" se la quitamos y nos la comemos ;) Pintamos con el almíbar la parte superior del trozo de bizcocho que irá en la base y el del medio.

9.- Colocamos el trozo de bizcocho que será la base, con la parte almibarada hacia arriba, y lo cubrimos con crema. Colocamos encima el segundo trozo y repetimos la misma operación. Por último, colocamos el trozo de bizcocho que hará de tapa.

10.- Con ayuda de una espátula repartimos crema por los laterales y la parte superior de la tarta, intentando dejarla lo más lisa posible. Guardamos en la nevera 30 minutos para que se endurezca un poco esta capa y nos sea más fácil aplicar la siguiente.



11.- Por último, repartimos una última capa de crema, más generosa, por toda la tarta. Para decorarla me ayudé del culo de una cucharilla, dibujando remolinos.


Trucos / Consejos / Variaciones
  • si no os gusta el coco podéis sustituir la nata de coco por cualquier otra nata vegetal. De todas formas, apenas se nota sabor a coco, ya que sabe a cacao.
  • aseguraos que la leche de coco tenga al menos un 55% de coco, de lo contrario no monta bien.
  • usé mantequilla de cacahuete "soft", sin trocitos, pero podéis usar la "crunchy", que tiene trozos de cacahuete.
  • una alternativa para el frosting si no os convence lo de la nata de coco, es usar mantequilla de cacahuete. La batís junto con azúcar glas y le añadís cacao. Eso sí, el resultado será mucho más empalagoso.
  • con la cantidad que os he dado no es demasiado intenso el sabor a mantequilla de cacahuete. Si queréis que sepa mogollón a cacahuete, podéis añadir más cantidad sin problemas.
  • el azúcar puede ser azúcar blanquilla.
  • si tenéis moldes para layer cake es aún más fácil: repartís la masa en tres moldes de layer cake y horneáis durante 25 minutos. Luego sólo tenéis que nivelarlos (quitarlas la panza) y ya.
  • el almíbar no es necesario, pero hace que la tarta quede más jugosa. 

Madre mía, ¡qué chapa os he metido! Pero es lo que tiene hacer una tarta, que el proceso es bastante laborioso, pero luego el resultado merece la pena...¡y además te lo puedes comer! ;)

Muás
Iratxe